¡Ándale! ¿Eres aficionado de la comida mexicana como nosotros? Porque hoy es vuestro día de suerte… Os traemos una receta bien de la tierra, que agradará hasta a los paladares más estrictos: el sabroso pico de gallo.
Es una receta bien fácil de hacer, incluso para los que no manejan muy bien esto de la cocina… Os aseguramos que os va a encantar. Fácil, rápida y sobretodo DELICIOSA.
¿Qué es el pico de gallo?
El pico de gallo es una ensalada o salsa muy típica de México, que suele ser un acompañante de otros platos principales, como los tacos, los nachos, diferentes carnes, y otras riquísimas recetas. Todos los ingredientes que añadimos a nuestra receta son frescos, y se pican muy bien. De ahí que sea tan fácil y rápido de hacer, porque no necesita ningún tipo de cocción ni nada que nos requiera un poco más de tiempo.
Hay que decir que esta no es una receta única, pues tiene diferentes variantes y puede hacerse a gusto de cada persona sin ningún problema. Nosotros en Santita, os ofrecemos una receta deliciosa: Santísimos Guacamoles, acompañados con pico de gallo y con totopos, o acompañados de pico de gallo de mango y totopos.
Receta: salsa mexicana paso a paso
Para hacer un delicioso pico de gallo, necesitamos estos ingredientes:
- 1 tomate, a ser posible que sea grande y que no tenga la piel muy gruesa
- ¼ o 1/3 de cebolla
- 1 chile jalapeño (esto es para darle ese gusto picante, pero si no tienes, puedes usar pimiento rojo o verde)
- Zumo de lima o limón
- Hojas de cilantro o perejil
- Sal (al gusto de la persona)
Bien, teniendo todos los ingredientes, procedemos a realizar nuestra deliciosa receta:
Lo primero es lavar el tomate, secarlo bien y trocearlo en cuadraditos pequeños. Después lavamos el jalapeño (o el pimiento, lo que sea que vayas a usar), secarlo y nuevamente cortar en trozos pequeños y en cubitos.
El siguiente paso es pelar la cebolla y como hemos hecha anteriormente, cortarla en pequeños cuadrados. Añadimos a un bol todos los ingredientes troceados y echamos zumo de lima.
Finalmente picamos el cilantro muy fino, lo echamos a la mezcla de ingredientes, y agregamos un poco de sal.
Lo mezclamos todo y ya tendríamos un riquísimo pico de gallo, listo para disfrutarlo y añadirlo a nuestro plato favorito.
Si os sobrase (aunque es muy difícil que esto pase, porque seguro que es devorado) podéis meterla en el frigorífico sin ningún problema, durante unos días.
Esperamos que os encante tanto como a nosotros… ¡viva la comida mexicana y viva México!